a solas con la sed
Sobrevivo en la esquina
del desierto porque
me hice cactus,
me alimento del pasado
que almaceno
en mis adentros,
necesaria humedad
para que el seco
no me quiebre,
para que no
se resquebraje la carne
que me mantiene
frente al sol eterno,
y me consumo bebiendo
sorbos sin derecho
a quitarme la sed.
Soy una paradoja
disidente del agua,
un insignificante
color verde perdido
entre el blanco
amarillento de la arena,
y el azul infinito
que proclama el cielo,
por eso del dolor
me nace roja la vida
como si fuese
una queja en la sangre,
riega los abortos
de las semillas
con sus gritos,
y me crecen púas
en las heridas
de cada viejo momento,
agujas que intentan
pinchar el viento
por si llevase
algún pedazo de ti.
Me reconozco
oscuro en cada grano
de la sombra
que imita mi forma,
reconozco
mis brazos en alto,
sobre los diminutos
cristales que juntos
se llaman arena,
deben ser miles
de millones, o más,
por eso me retienen
en el fuego de este mar
hecho con olas secas,
por eso en las noches
se ríen crujiendo
sus dientes desde el frío
que juega al escondite
con la soledad.
"A solas con la sed"
© pokit in a pocket. chus alonso díaz-toledo. 2008
5 comentarios
raquel -
Te mando un beso porteño desde este lado del Atlántico, Flaco Loco y adorable.
Keka -
virginia -
Besos chus
cris -
Ariadna -
Chus, un beso por cada letra de tus poemas.